¿Qué Es Una Dieta Baja En Carbohidratos? ¿Y el Ayuno Intermitente?

Esta no es la pregunta adecuada.

Es esta: ¿qué puedo ganar con una dieta baja en carbohidratos y con ayuno intermitente?

¿Qué Es Una Dieta Baja En Carbohidratos? ¿Y el Ayuno Intermitente?

Y la respuesta es MUCHO. Porque las Dietas Bajas en Carbohidratos y el Ayuno Intermitente son las mejores herramientas para revertir la Resistencia a la Insulina, problema metabólico que puede aparecer por distintos motivos, pero que siempre mejora, incluso desaparece del todo, con una dieta baja en carbohidratos y ayuno intermitente.



La Resistencia a la Insulina es un desequilibrio entre las hormonas que controlan nuestro peso y nuestro metabolismo.

Por un lado, tenemos a la insulina, que siempre se activa después de comer, para convertir parte de los nutrientes de las comidas en grasas que encierra en el vientre como reserva de combustible para usar en las horas de ayuno. (Lógico) 🙂


Es decir, después de comer siempre entramos en fase de almacenamiento. Metabolismo que nos crea grasas y nos empuja a engordar.

Horas después los nutrientes de las comidas ya se han gastado, y la insulina también se ha desactivado y ha bajado su concentración en sangre. Es decir, tenemos pocos nutrientes y poca insulina en sangre, y nuestro cuerpo sale de la fase de almacenamiento y entra en la de ayuno.


En fase de ayuno se activan otras hormonas que liberan las grasas del vientre para que alimenten nuestros tejidos.

Es un metabolismo que quema grasas y nos empuja a adelgazar el vientre.


Esta alternancia de fases y metabolismos es ideal porque nos proporciona buen peso, buena vida y buena salud. 🙂


Si este equilibrio se rompe, es porque siempre tenemos mucha insulina activa en sangre y debutamos con Resistencia a la Insulina.

Como siempre tenemos niveles altos de insulina en sangre, siempre estamos en fase de almacenamiento y creando grasas que guardamos en el vientre y que nunca quemamos.

Por esto, quien tiene Resistencia a la insulina, tiene mucha facilidad para engordar a base de vientre (Puede ser 1 kilo-2-4-6 o más, sin saber muy bien por qué).

También tiene poca energía. Lógico, porque solo crea grasas que nunca quema.
De ahí el hambre frecuente, antojos, fatiga, fragilidad emocional y dificultad para concentrarse. Esto no es un problema sicológico, es un problema hormonal.

Y por último, como la Resistencia a la Insulina conlleva Inflamación crónica, también hay dolores de fibromialgia, jaquecas o de artrosis.


Esto era lo malo que te quería decir, lo bueno es esto: se puede mejorar, incluso revertir del todo, en unas semanas. 🙂


Y en ese caso, los antojos y dolores mejoran, y el cansancio y la fragilidad emocional desaparecen. Y viene energía y buen humor.

Se eliminan líquidos y grasas del vientre. Se pierden varias tallas. Y cuando una se mira al espejo se ve mucho mejor y le sube la autoestima. 🙂


En cambio, si dejas que la Resistencia a la Insulina evolucione y evolucione sin freno, puede acabar provocando diabetes tipo II, hipertensión, arteriosclerosis… 🙁

Y sí, tienes razón: Resistencia a la Insulina y Síndrome Metabólico son lo mismo.

¿Solución?

Pues como la causa son los niveles altos insulina activa en sangre a todas horas… la solución es bajar la concentración de insulina en sangre. (También lógico)

Y las mejores herramientas para conseguirlo son las Dietas bajas en Carbohidratos y el Ayuno Intermitente.

¿Qué es una dieta baja en carbohidratos?

Una alimentación que no admite alimentos artificiales hechos con harinas, azúcares, ni cereales blancos. Simplemente.

Estos alimentos reaccionan muy mal con nuestra biología. Sus nutrientes pasan del intestino a la sangre tan rápido que nos provocan una respuesta hormonal por parte de la insulina, también muy rápida que no nos conviene. 🙁

Decir dieta baja en carbohidratos es decir muy poco porque tenemos 3 niveles distintos. Dependiendo de tu perfil, y de tus necesidades, te puede convenir una u otra.

1: Las Dietas cetogénicas o muy bajas en carbohidratos.

El primero que habló de ellas fue Atkins en su libro de nutrición revolucionaria ya en 1998. Y se llevan usando desde entonces para ayudar a perder peso a l@s que tienen mucha resistencia (Como ves, no son algo moderno)

Después, en los 2000, aparecieron varias clínicas en EEUU y Canadá, entre ella la Virta Health, que usa esta misma dieta para curar a sus pacientes de la diabetes tipo II y de los problemas del sobrepeso.

No admiten más de 20 gramos de carbohidratos netos al día, (o de 30 totales).

Los carbohidratos totales son la suma de los netos y de la fibra.

Porque la fibra son carbohidratos que no se absorben (casi) y no engordan, son probióticos, (alimentan a nuestra flora intestinal amiga) y retrasan la absorción de los otros nutrientes y así mejoran nuestra respuesta hormonal… Todo ello es muy positivo. 🙂

Conclusión: la gran mayoría nos beneficiamos de la fibra. Quedan fuera quien padece de intestino permeable.

En cambio, los carbohidratos netos sí se absorben. Y si comemos demasiados nos empujan a engordar. Estos son nuestros enemigos.

Estas dietas muy bajas en carbohidratos bajan mucho nuestros niveles de insulina en sangre. Y nos meten en otro metabolismo que se llama Cetosis Nutricional, que nos ayuda a olvidarnos del hambre y de las comidas, y a perder líquidos y grasas del vientre.

Ideal para curar la diabetes tipo II, y para ayudar a adelgazar a quien tiene mucha dificlutad.

Y no te preocupes, porque la Cetosis Nutricional es algo fisiológico, normal, que nos ayuda a sobrevivir. Sin ir más lejos, todos los niños y adolescentes entran en cetosis nutricional cuando no comen durante12 horas.

El problema es que a veces se confunde con Cetoacidosis, que sí es una enfermedad donde la persona entra en coma y requiere ayuda urgente.

Cualquiera tampoco puede entrar en Cetoacidosis. Solo alcohólicos muy pasados, diabéticos tipo I (los que se pinchan insulina) si se descompensan, y diabéticos tipo II que usan estos fármacos: dapagliflozina, canagliflozina y empagliflozina, y se descompensan. 🙁

Si no estás dentro de estos 3 perfiles, nunca vas a entrar en Cetoacidosis.

2. Dietas moderadamente bajas en carbohidratos.

Te dejan comer hasta 50 gramos de carbohidratos netos al día. Son muy sanas. Mejoran los análisis y ayudan a revertir esos síntomas tan negativos de antojos, falta de energía y dolores.

Pero no siempre ayudan a perder peso. No a quienes tienen mucha resistencia.

3.Dietas bajas en carbohidratos liberales.

Te permiten comer hasta 100 gramos de carbohidratos netos al día.

Apta para todos: niños, embarazadas y señoras dando pecho.

No te permite comer dulces, ni harinas, ni arroz blanco. Pero si legumbres, patatas y todas las frutas no tropicales.

Si quieres saber en qué condiciones y para qué perfiles están indicadas estas dietas, y cómo puedes preparar platos en cualquiera de los 3 niveles, con ejemplos incluidos, te recomiendo que pinches debajo:

DIETAS BAJAS EN CARBOHIDRATOS

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¿Y qué es el ayuno intermitente?

Consiste en aumentar las horas de ayuno natural entre la cena de hoy y el desayuno de mañana.

¿Cómo?

Tienes mil posibilidades. Deberías escoger un protocolo que se adapte a tu vida (que te sea fácil y sostenible) y que sea eficaz porque te ayude a conseguir lo que estás buscando.

El ayuno intermitente es una herramienta ideal para revertir la resistencia a la insulina y perder volumen, pero no solo. También mejora hígado graso, diabetes, hipertensión, problemas digestivos…

El primer nivel de ayuno intermitente es evitar el picoteo entre horas.

El segundo nivel, agrupar tus comidas en 12, 10, 8 horas del día, las que quieras. Por ejemplo, de 8 a 20, o de 10 a 20. Estos ayunos, hasta de 16 horas y ventana de 8 para comer, son siempre muy sanos para tod@s.

El siguiente nivel ya no es apropiado para niños ni para embarazadas. Y si padeces de diabetes tipo II o tomas varias medicinas… cuidado. Todas no son compatibles con el ayuno. 🙁

Por último, si piensas ayunar más de 3 días, deberías tomar suplementos de vitaminas y minerales para evitar problemas serios de salud. Problemas poco frecuentes, pero cuando ocurren son muy tristes, sobretodo porque eran evitables.

Todos los protocolos de ayuno intermitente tienen que cumplir estas condiciones para que sean adecuados:

1. Que lo hagas con mucha frecuencia (para eso no te pueden hacer pasar hambre ni malestar, para no abandonar)

2. Y que te permitan seguir haciendo tu vida corriente: trabajando, haciendo ejercicio físico, compartiendo comidas con tus amigos y familiares, o lo que sea que hagas habitualmente.

Existen miles de protocolos de Ayuno Intermitente, solo tienes que encontrar el tuyo. 🙂

Y para acabar, pincha debajo para visualizar el vídeo:

LOS 7 ERRORES FRECUENTES QUE TE HACEN FRACASAR CON EL AYUNO INTERMITENTE… Y LA SOLUCIÓN

También me puedes escribir a info@doctoramaite.com. Te espero 🙂

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